
¿Por qué es clave usar mascarilla capilar una vez a la semana?
Share
Si tu cabello está teñido, decolorado, alisado o simplemente se expone al calor constantemente, incorporar una mascarilla capilar una vez a la semana puede hacer una gran diferencia. No es un lujo: es un paso esencial para mantener la salud, fuerza y brillo de tu melena.
¿Qué hace una mascarilla capilar que no hace un acondicionador?
A diferencia del acondicionador diario, que solo actúa en la superficie, la mascarilla capilar penetra profundamente en la fibra capilar. Su fórmula más concentrada permite:
- Reponer lípidos, proteínas y humedad perdidos
- Reparar daños causados por tintes, planchas, decoloración o sol
- Mejorar la resistencia, elasticidad y suavidad del cabello
- Fortalecer desde el interior y sellar la cutícula
Ingredientes clave (según lo que tu cabello necesita)
- Keratina: reestructura la fibra capilar dañada
- Aceite de argán o coco: nutren intensamente y aportan brillo
- Colágeno y ácido hialurónico: fortalecen y dan cuerpo al cabello fino
- Aminoácidos y proteínas vegetales: reducen el frizz y mejoran la textura
¿Cómo se usa correctamente?
- Lava tu cabello como de costumbre
- Retira el exceso de agua con una toalla
- Aplica la mascarilla sobre cabello húmedo (no mojado), de medios a puntas
- Déjala actuar de 10 a 20 minutos (si puedes, usa gorra térmica o toalla caliente)
- Enjuaga con agua fría o tibia para sellar la cutícula
No reemplaza al acondicionador: este paso es complementario y sirve para el cuidado diario, mientras que la mascarilla es un tratamiento intensivo semanal.
¿Cada cuánto debes usarla?
- Cabello levemente dañado o virgen: 1 vez cada 10 días
- Cabello con tinte o uso frecuente de calor: 1 vez a la semana
- Cabello muy dañado o procesado: 2 veces por semana durante 1 mes, luego reducir
Crea tu propio “spa capilar” en casa
Dedica un momento solo para ti: pon música, haz un masaje capilar, aplica tu mascarilla capilar favorita y deja que los ingredientes actúen mientras te relajas. Es una forma sencilla de cuidar tu cabello y también de regalarte bienestar.
Una rutina sin mascarilla es como una rutina de skincare sin hidratante: puede funcionar… pero no es suficiente. Tu cabello lo merece.